Palabras cruzadas


martes, mayo 24, 2011

Lo más natural

Me dejaste -como ibas de pasada- 
lo más inmaterial que es tu mirada.

Yo te dejé -como iba tan de prisa-
lo más inmaterial que es mi sonrisa.

Pero entre tu mirada y mi risueño
rostro quedó flotando el mismo sueño.

sábado, mayo 21, 2011

Iluminando el mundo

He aprendido a reconocer de lejos a los miembros de esta especie de secta cada vez más exigua que podríamos llamar los conversadores. No hay necesidad de trámite, ni de credenciales ni de registros para ser un buen conversador.  La única seña está en la facilidad con que traban cercanía y descubren sus emociones, dudas, pesares y proyectos como quien desgrana un rosario.  Impúdicos y desmesurados se vuelven invulnerables, porque todo lo suyo lo comparten.  Y si un problema tienen, es el que los hace vivir corriendo el riesgo de derivar en chismosos.  Nada tan despreciable para un conversador como un chismoso, y para su desgarcia, nada más cercano a la vera del acantilado por el cual camina.  Antes que nadar, comer, dormir o cualquier otro placer parecido, los conversadores prefieren intercambiar palabras.  Sólo los besos y sus prolongaciones son tan placenteras para un conversador como las palabras.  Tal vez porque los besos están emparentados con las palabras, y el amor puede ser una conversación perfecta.  De ahí que los conversadores tienden a enamoradizos.  Como tienden también a cantar cuando están solos o a colgarse del teléfono a propósito de casi cualquier cosa...
Cuando sienten que el día no les rindió, que algo le falta al mundo para poder cerrarse sobre su almohada, se prenden de un libro o de una película de esas en que no importa lo que pase, con tal de que importe lo que se diga.

miércoles, mayo 04, 2011

Y yo me voy metida de nuevo en mi esfera de silencio que eres , y el silencio, yo adentro del silencio, yo dentro de ti que eres la ausencia, camino por las calles dentro del caparazón de tu silencio.
¡ Aunque la mona se vista de seda, mounstrosa se queda !

¡ Aunque la mona se vista de seda, mounstrosa se queda !

¡ Aunque la mona se vista de seda, mounstrosa se queda !