No se olvida el 2 de octubre, la matanza, la conspiración, la sucia y asesina maniobra del gobierno para acabar con el movimiento. Y no se olvida por canallesca, porque ni siquiera la mancuerna Díaz Ordaz-Echeverría fue capaz de ir de frente a reprimir, tuvieron que construir una conspiración, crearon el Batallón Olimpia y sus francotiradores, les dieron órdenes de disparar contra una multitud desarmada en la que abundaban los adolescentes y los vecinos de Taltelolco, incluso dispararon contra el Ejército cuando tomaba la plaza para crear la cobertura.
Nunca se olvida.
ResponderEliminarY me tomo la osadía de utilizar el cuantificador "NUNCA"